Parlamento Andaluz muestra su apoyo a la candidatura de las Hazas de Suerte
El alcalde , José Ortiz y la teniente de alcalde concejal de Cultura, Francisca Sánchez junto al técnico de la delegación de cultura se han reunido esta mañana con el Presidente del Parlamento Andaluz, Juan Pablo Durán, quien ha mostrado su apoyo a la candidatura de las "Hazas de Suerte del Común de Vecinos" como Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO.
El Presidente se ha comprometido a trasladar a los Grupos Parlamentarios toda la información al respecto para conseguir el apoyo unánime de la Cámara y la declaración institucional del Parlamento.
Durán ha manifestado que la candidatura de las Hazas de Suerte tiene todos los alicientes y características para destacar como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por su tradición social y parte importante de la idiosincrasia del pueblo.
El pasado mes de mayo, el presidente Durán intervino en el acto homenaje a la figura de Juan Relinque como Síndico Procurador y Defensor del Pueblo 1500-1544, un acto en el que resaltó que las Hazas de Suerte merecen el reconocimiento de Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO porque no es solo un ritual festivo que se repite cada mes de diciembre, es "la forma más igualitaria y equitativa de repartir unos bienes comunales y se trata de un elemento de identidad que se transmite de generación en generación", ha comentado el Presidente.
Las Hazas, además de una cita importante en el calendario, dijo, "contribuye a reforzar el sentimiento de colectividad y de relaciones entre vecinos y al diálogo y al entendimiento entre las personas".
Juan Relinque, vecino de Vejer en el Siglo XVI, lideró las reivindicaciones del pueblo contra las disposiciones del Duque de Medina Sidonia y, tras acudir a la justicia, ganó todos los pleitos presentados ante la Chancillería de Granada y se recuperaron las tierras, que se conocen como Hazas de Suerte. Se le sitúa en el origen de los defensores del pueblo, un icono de la pervivencia de un patrimonio único en el mundo que representa el espíritu de libertad y defensa de los derechos comunales de los vecinos y vecinas de un pueblo y de todos los pueblos.